La exploración y la aventura en lugares extranjeros son fundamentales para la condición humana. Desde las primeras migraciones primitivas a través de los continentes hasta los barcos de vela, los aviones y los cohetes, estamos constantemente en busca del próximo gran viaje.

En los últimos cien años, hemos ido a lugares extremos e increíbles: el Polo Sur, el fondo del océano, la Luna…

Pero aún nos espera otro gran viaje: el camino a Marte.

El camino hacia Marte

Dado nuestra historia, no es sorpresa que Star Trek haya sido la primera película de ciencia ficción en dominar la conciencia general en la década de 1960. Una tripulación de valientes aventureros en una asombrosa nave espacial que les permitía ir audazmente donde nadie había estado antes.

Aunque aún no estamos allí, la NASA tiene un plan actual para llevar a los primeros humanos a la superficie de Marte y traerlos de regreso a salvo para contar la historia.

Veamos qué pasos presenta este plan.

Estableciendo una presencia avanzada en la Luna

El primer paso en el proceso de llegar a Marte es establecer una presencia avanzada y permanente en la Luna. Puede que no parezca una gran diferencia, pero ir de la Luna a Marte será mucho más fácil que ir directamente de la Tierra a Marte.

La gravedad de la Tierra y su densa atmósfera la convierten en un buen lugar para vivir, pero también limitan cuántas cosas podemos lanzar al espacio de una vez. La Luna no presenta ninguno de estos problemas.

Será más difícil sostener la vida allí, pero si podemos resolverlo, la Luna se convertirá en un puerto espacial ideal, una puerta de entrada al sistema solar. Este es el objetivo a largo plazo del programa Artemis de la NASA.

Una base lunar avanzada con estructuras modulares, vehículos y astronautas trabajando, y la estación espacial lunar gateway en el horizonte

La NASA no solo regresa a la Luna para plantar otra bandera y burlarse de los comunistas, aunque eso también lo harán. Esta vez, las Misiones Artemis 4 a 10 se centrarán en aprender a vivir en la Luna.

Eso significa utilizar los recursos in situ, encontrar agua y oxígeno propios, y utilizar las rocas y metales ya presentes en la Luna para comenzar a construir nueva infraestructura.

Al mismo tiempo, la NASA y sus socios crearán la estación espacial lunar Gateway, un puesto de avanzada en el espacio profundo en una nueva frontera. A medida que la NASA establece su presencia humana en la Luna y el espacio cis-lunar, también expandirá su presencia robótica en Marte.

Esto significa nuevas sondas, pero la perspectiva más emocionante para los próximos 10 años es el despliegue a gran escala de máquinas voladoras en Marte.

Otro artículo interesante: La NASA revela su plan para capturar un asteroideLa NASA revela su plan para capturar un asteroide

La exploración aérea y recolección de muestras en Marte

Con el éxito del primer vuelo de prueba del dron Ingenuity durante el último año, ahora hemos confirmado que podemos volar helicópteros en Marte.

Esto abre una nueva y emocionante posibilidad de exploración y recolección de muestras en el planeta rojo. Incluso la NASA tiene un plan para desplegar una estación espacial autónoma en la órbita de Marte, que actuaría como un punto de escala más permanente no solo para las misiones que van a Marte, sino también para los vuelos de regreso.

Una parte importante de la siguiente fase de investigación en Marte serán las misiones de retorno de muestras.

Ya no habrá vuelos de solo ida a Marte. Esa es la esencia del plan de la NASA de ir de la Luna a Marte.

Establecemos una base en la Luna, aprendemos a sobrevivir y construir en el duro ambiente de un mundo sin vida, al mismo tiempo que aprendemos todo lo posible sobre el planeta Marte y establecemos una base robótica para que lleguen allí las primeras personas.

Con todo eso en su lugar, finalmente estamos listos para ir a Marte.

Pero antes de que las personas lleguen allí, habrá uno o más envíos de suministros para asegurarse de que todo lo que estos astronautas necesitarán para sobrevivir y regresar a casa ya esté allí esperándolos.

Astronautas en marte recolectando muestras

La llegada a Marte y el regreso a la Tierra

Para llevar a las personas de la Tierra a Marte, la NASA desarrollará un hábitat de tránsito que emplee una combinación de propulsión química y eléctrica.

Esto permitirá acomodar a un equipo de cuatro personas en la misión a Marte y de regreso. Dos tripulantes permanecerán en órbita durante toda la duración de la misión, mientras que dos descenderán a la superficie ya que el aterrizaje en Marte será un poco complicado.

Hay dos perfiles de misión para ir a Marte: una estancia corta y una estancia larga.

Para la misión de estancia corta, el período de ida durará 217 días y utilizará la asistencia gravitacional del planeta Venus para impulsar la nave espacial en su camino. La estancia en Marte durará 30 días y el viaje de regreso será agotador, con 403 días en el espacio profundo. Sin embargo, será más seguro que pasar un período prolongado en Marte.

Para la misión de estancia larga, el período de ida será de 210 días en un curso directo de la Tierra a Marte, sin requerir impulso gravitacional. La estancia en Marte en este escenario será de 496 días, lo que significa una misión significativamente más larga que requerirá mucha más planificación y despliegue previo. La ventana de regreso se reducirá a 210 días, ya que la tripulación aprovechará una ventana de transferencia ideal.

Es importante tener en cuenta que este plan se basa en la tecnología que tenemos disponible actualmente. Sin embargo, la NASA está trabajando en un sistema propulsor de próxima generación que haría el viaje de ida y vuelta a Marte significativamente más rápido y fácil.

NASA y la agencia de proyectos de investigación avanzada de defensa DARPA están realizando una fusión científica que resultará en la primera nave espacial tripulada propulsada por un motor de cohete térmico nuclear.

Otro artículo interesante: La verdadera razón de la NASA para ir a JúpiterLa verdadera razón de la NASA para ir a Júpiter

La colaboración entre la NASA y DARPA ha dado lugar al proyecto llamado DRACO, que es el acrónimo de ‘Cohete de Demostración para Operaciones Lunares Ágiles’

Comparado con el rendimiento de un motor de cohete químico utilizado en el vacío del espacio, el motor de cohete térmico nuclear debería proporcionar entre tres y cinco veces mayor eficiencia.

Eso se traducirá en una nave espacial capaz de viajar más rápido, transportar más carga útil, recorrer distancias más largas y maniobrar por el espacio de manera más rápida y fácil que cualquier vehículo que hayamos utilizado hasta ahora.

En la práctica, esto podría significar reducir el tiempo de tránsito para una misión tripulada a Marte de hasta ocho meses a tan solo 45 días.

Cuanto más tiempo pase una tripulación en tránsito, mayor será el riesgo al que se enfrentarán, incluida la potencialmente mortal radiación cósmica.

Del mismo modo, cuanto más tiempo tenga una tripulación que vivir en el vehículo, más suministros como comida y agua deberán llevar con ellos. Y en lo que respecta a los vuelos espaciales, cada gramo de masa que lleves contigo es importante.

Se espera que DRACO esté operativo en un plazo relativamente corto, en menos de cinco años a partir de ahora.

Eso implica que estas agencias están bastante seguras de que lo tienen resuelto y que es muy probable que el motor nuclear esté listo para construir la primera nave espacial de hábitat de tránsito a Marte en unos diez años aproximadamente.

Por supuesto, cualquiera que siga la industria de vuelos espaciales sabe que nada sucede a tiempo y que cada proyecto siempre se retrasará. Sin embargo, es mucho más divertido y satisfactorio pensar en estas cosas desde el optimismo.

Conclusión

Los seres humanos tienen un largo historial de lograr cualquier cosa que nos propongamos con pura voluntad, determinación y espíritu.

Y el espíritu humano se niega a quedarse en un solo lugar durante mucho tiempo.

Por eso, vamos a Marte. El viaje está en nuestra naturaleza.

La exploración espacial hacia Marte es el siguiente gran desafío de la humanidad.

La NASA tiene un plan establecido que incluye el establecimiento de una presencia avanzada en la Luna como puerta de entrada al sistema solar. Además, se están realizando avances en la tecnología de propulsión para acortar el tiempo de viaje y hacer posible el envío de tripulaciones a Marte.

Aunque es un plan ambicioso y presenta desafíos técnicos considerables, la determinación humana y el espíritu explorador nos llevarán a conquistar el planeta rojo. Con cada paso que damos, nos acercamos cada vez más a la realización de este gran sueño de la humanidad.

Otro artículo interesante: Cómo construiremos una civilización subterránea en MarteCómo construiremos una civilización subterránea en Marte

 

Autor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *